viernes, 8 de mayo de 2009

Identificar y tratar la ansiedad

Se trata de la patología mental más frecuente. No la más grave pero sí la que causa más sufrimiento. Generalmente no es diagnosticada hasta que ya se ha cronificado y ha limitado de forma importante la vida del paciente. Su incidencia aumenta día a día.

Entrevista con el equipo médico-psicológico del Centro ITAE

¿Cada vez más gente sufre ansiedad?

La psiquiatría y la psicología hoy tienen la capacidad de diagnosticar este tipo de trastornos que antes eran catalogados de neurosis, manías, o simplemente no se diagnosticaba nada. Hoy sabemos clasificarlos como lo que son y, lo más importante, sabemos comon tratarlos.

Otro factor que ha contribuido, es la rapidez con la que ha evolucionado nuestra sociedad en las últimas décadas. La presión a la que estamos sometidos, la cantidad de información que recibimos, la competencia a la que nos enfrentamos, las nuevas estructuras familiares, la adaptación a nuevas tecnologías, etc.

Todo esto es difícil de asimilar para el cerebro humano que, en ese mismo período de tiempo, ha evolucionado menos que nuestra forma de vida.


¿Cómo puedo saber si mi ansiedad o mi estrés son una enfermedad?

El sufrimiento que padece una persona con ansiedad patología es realmente limitante. Los pensamientos negativos empiezan a gobernar la vida (miedo, preocupación constante, temor a volverse loco, a perder el control, etc.), aparecen síntomas físicos reales, que asociamos con peligro inminente (taquicardias, ahogos, mareos, molestias gástricas, sudoración, etc.) y en algunos casos empezamos a evitar situaciones que antes eran consideradas normales (transporte público, sitios con aglomeraciones, cenas, cines, no podemos ir a trabajar, viajar es sinónimo de terror...


¿Cómo se trata esta enfermedad?

Los estudios científicos más recientes, nos indican que el abordaje más eficaz es el que integra lo mejor de la psiquiatría y lo mejor de la psicología, lo que llamamos un abordaje multidisciplinar basado en técnicas cognitivo-conductuales aplicadas por psicólogos realmente especializados en trastornos de ansiedad.

Es imprescindible empezar por diagnosticar el tipo de trastorno de ansiedad de que se trata. Cada trastorno de ansiedad requiere de un protocolo de abordaje distinto y de un plan de tratamiento a la medida de la persona que lo padece y de las circunstancias que lo rodean.




Muchas personas no creen o no quieren acudir a un psiquiatra o psicólogo.

Si una persona está pasando por un momento especialmente estresante o tiene un nivel de ansiedad elevado por alguna circunstancia concreta, posiblemente no necesite ayuda profesional, pero si la problemática persiste a lo largo del tiempo o el nivel de intensidad es muy elevado, es prácticamente imposible que pueda salir de esta situación sin ayuda médica. Estamos hablando de una enfermedad real y que puede conllevar consecuencias importantes y graves para la vida de la persona, limitándola hasta el punto de que quede enclaustrada en su casa y con unos niveles de sufrimiento realmente insoportables. Nuestra recomendación es que se pongan en manos de especialistas y que no vean a los psiquiatras y psicólogos como loqueros, sino como médicos y especialistas capaces de tratarles y enseñarles las pautas para recuperar su estado normal.

¿Tiene curación?

Los resultados de nuestro centro coinciden con las cifras de lo que publican prestigiosos centros americanos y es que, si se aplican las técnicas comentadas de forma correcta y bajo equipos coordinados de médicos y psicólogos especialistas en ansiedad, se alcanzan niveles de recuperación de un 82% de los pacientes.

Si se hace un trabajo riguroso y el paciente realmente trabaja y no abandona el tratamiento, podemos conseguir, en la mayoría de los casos, restablecer la calidad de vida que la persona tenía antes de padecer esta enfermedad.

A pesar de la gravedad de la situación, escuchándoles parece que podemos ser optimistas.
Las evidencias científicas nos invitan a serlo. Sí, podemos ofrecer a nuestros pacientes esperanzas para recuperar su calidad de vida, dejar de sufrir y volver a vivir con dignidad. Cuando el tratamiento se realiza por especialistas en ansiedad y el paciente realmente se entrega al tratamiento, no hay motivos para ser pesimistas.



Entrevista extraída de la revista Salud y Vida (marzo de 2007)

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